2.7.10



02/07/10
Es de esas películas que sabes que tienes que ver en algún momento en la vida, sobre todo si eres fanático del cine clásico de terror y de la psicología asesina. Con todo llevaba un tiempo esquivando la película, quizá creyendo que sería del tipo que no envejece demasiado bien. Pero tras toparme una referencia al director durante algún programa de televisión me dije que era justo el momento para darle una oportunidad.



"Do you know what the most frightening thing in the world is? It's fear"

Es curioso pensar que dos de las películas más icónicas sobre la psicología de los asesinos fueron presentadas durante el mismo año. Mientras que "Psycho" sin duda conseguiría más popularidad en todos los niveles, no por ello "Peeping Tom" resultaría menos importante tiempo después, aunque en su momento resultó mucho más censurada y criticada. Ambas inspiradas libremente en dos también icónicos asesinos: Ed Gein y Harvey Glatman.

En "Peeping Tom" se retrata la vida de Mark Lewis, un introvertido y extraño fotógrafo obsesionado con las teorías del miedo. No hay sorpresa alguna, prácticamente desde el principio sabemos cuáles son las oscuras motivaciones que lo mueven, aunque tendremos que ir sumergiéndonos levemente en su psicología para entender un poco más de lo que sucede. El título (aunque en español sería traducido como "El fotógrafo del pánico") refiere directamente al vouyerismo. Mark es un hombre obsesionado con ver, y con guardar registros minuciosos de todo lo que ve. Para lo cuál su profesión como camarógrafo en una productora de series televisivas, y su trabajo a medio tiempo de fotógrafo de viñetas pornográficas, sería el escape más que adecuado. Pero esas fotografías dramáticas, eróticas, cotidianas no son suficientes para él, y buscará siempre el siguiente escalón, retratar a las personas en su último momento, y retratarlas no sólo a ellas, sino al terror en su estado más puro mientras es reflejado en los ojos de alguien que se sabe a punto de morir.

La trama se sostiene básicamente sobre el personaje de Lewis, y nos deja también una cierta sensación morbosa de que nosotros mismos, como espectadores, nos encontramos mirando sin permiso. Como si fuésemos también nosotros invasores de la privacidad del protagónico, como si irrumpiéramos junto a él en la vida de las demás personas. Aunque se pensó en varias opciones para el actor que encarnaría dicho personaje, la elección final fue Karlheinz Böhm, y creo que ahora resulta difícil imaginar a alguien más dentro de aquel papel. Consiguió, sin duda alguna, meterse en la piel de aquel personaje tímido, nervioso, excéntrico que vivía a través del lente de su cámara.

Los demás personajes tienen una relevancia realmente mínima más allá de su encuentro en los planes del protagónico. Todos quizá a excepción del padre del mismo, quien apenas si aparece en algunos flashbacks y de manera no demasiado clara (que, además, fue representado por el propio Michael Powell aunque no apareciese en los créditos). Su participación en ello es casi freudiana: en realidad todo gira en torno a él, al modo en que crió a su hijo y lo convirtió, de alguna manera, en lo que ahora es. Un detalle psicológico fantástico que también encontramos, justamente, en "Psycho": la obsesión de Norman Bates por su madre muerta. Aunque el papel de ambos progenitores en cada caso tomaría un rumbo completamente distinto en los perfiles de los asesinos.

Hay algunos detalles que quizá no quedan del todo bien, aunque en casi todos los casos entiendo la elección aunque me sigue pareciendo que suena mejor como concepto que en su aplicación práctica. Uno de esos detalles, quizá el más relevante, es la elección del arma homicida. Que no voy a contarles cuál es, claro está. Pero me parece que de manera simbólica funciona, aunque ya en las escenas en que abarca un primer plano no queda del todo bien. Pero sólo son eso, meros detalles, el cuidado en el desarrollo de la trama, del personaje protagónico y de la ambientación, me parece sencillamente fantástico.

La película representó un terrible momento para el director, ya que aparentemente el buen público lo identificó directamente con la figura del asesino, del hombre morboso obsesionado por acosar a los demás con su cámara. Pero el tiempo ha terminado por darle la razón.
Ahora que lo pienso no sé por qué la película no es mencionada en "La guía de cine del perverso" cuando me parece que sus símbolos freudianos y el uso de la cámara hubieran permitido teorías interesantes. Por otro lado se menciona otra película de Powell, "Las zapatillas rojas", que será sin duda la próxima que mire de él.




Un clásico, en toda la extensión de la palabra, y una excelente película en su género.

¿Película favorita de Michael Powell?








1 comentario:

  1. 49th Parallel y Black Narcissus son mis favoritas... colaboraciones con Emeric Pressburger XDXD

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