19.3.11


19/03/11
Hace como un millón de años Ojos De Niebla me recomendó ver esta película. Y como la excelente amiga que soy lo olvidé hasta hará cosa de unos meses y eso porque salió en mi elección al azar de películas. La verdad es que de otro modo no me hubiera inclinado por una película que trata directamente sobre el tema del amor, y en la que aparece Michael Cera.



"Your love glass is half full"
Lo cual nos demuestra, una vez más, que cuando una persona cree que una película no entra dentro de su categoría de gustos, puede estar completamente equivocada. Y es que si alguien te dice que la película va sobre una chica, Charlyne Yi, que no cree en el amor y el documental que se arma a su alrededor respecto a la búsqueda del verdadero significado del amor, te esperas algo increíblemente cursi. O al menos yo me lo esperaba.

Al parecer Charlyne Yi, que es una chica real, ha hecho algunas cosillas en televisión y cine de las que jamás había escuchado hablar. Y dado que entre ellas se incluye ser uno de los invitados en la fiesta inicial de "Cloverfield", me inclinaré a pensar que no son demasiado relevantes. Lo que sí parece ser es que es una comediante y que junto con el director ideó todo este falso documental no tan falso.
Es decir, parte del encanto del documental es que no podemos saber qué cosas son ciertas y cuales son montadas. Y cuales son parcialmente ciertas y estratégicamente adaptadas para la pantalla. Lo cual le da un buen toque, si me lo preguntan. Y, bueno, Charlyne Yi no cree en el amor aunque todos sus amigos están dispuestos a demostrarle lo contrario. Así que ella va por el mundo (o al menos por una parte de Estados Unidos) entrevistando a cualquier persona y su relación con el amor: sacerdotes, gente de la capilla de Elvis en Las Vegas, abogados de matrimonios, abogados de divorcios, parejas homosexuales que quieren casarse, parejas homosexuales que no quieren casarse, amigos, científicos, matrimonios de muchos años, matrimonios de pocos años. Y un largo etcétera. Entre todo este asunto de investigación (con adorables intermedios en que las historias de algunos personajes se dramatizan con muñequitos de papel) se cruza Michael Cera. Casual, porque al parecer a Michael Cera se le puede conocer en una fiesta cualquiera, si sabes juntarte con la gente correcta. Se cruza Michael Cera y su interés por Charlyne Yi y el inesperado interés de ella también. Chan chan chán. Ahora el buen Nicholas Jasenovec ya no sólo tendrá que guiar a Charlyne por la metafísica búsqueda del significado del amor sino de manera específica por el nuevo camino romántico que está por iniciar. Y todo lo que eso involucra.

La película funciona muy bien en ambas direcciones, ya sea que la queramos ver como un documental muy sencillo y casero que se procura acercar a varias perspectivas del amor desde ciertos casos; hasta la ficción donde vemos a una joven que tiene que lidiar con sus prejuicios sobre el amor dentro de una relación en la que tiene que aceptar que no es que no crea en el amor sino que no quiere caer en él. Bueno, es cierto que el caso de la ficción si lo viéramos de manera independiente podría resultar un poco cursi, pero por suerte se complementa bastante bien con las demás historias, que además nos dejan con la moraleja de que ninguna pareja particular reescribe el amor, sino que es algo mucho más complejo.

Ya había dicho que me estaba reconciliando con Michael Cera en "Scott Pilgrim vs The World" pero la verdad es que para entonces ya lo había perdonado. Claro, ahora tendré que esperar a ver qué hace después. Pero desde "Paper heart" (que la vi antes aunque la reseñe después) ya comenzaba a verle al menos un poco de potencial al joven. De hecho resulta una buena contraparte para el extraño personaje de Charlyne, quien se agradece se aleje de cualquier estereotipo hollywoodense de chica en busca del amor, o algo así.
Y hablando de no saber qué es real y qué es ficción, hay que aclarar, además, que Charlyne Yi y Michael Cera realmente eran pareja mientras se grababa la película. Y aunque comenzaron a serlo desde antes del proyecto (o eso me parece) en realidad tampoco podemos saber hasta qué punto lo que estaba sucediendo eran momentos programados para seguir una trama y cuánto era sencillamente visiones de una pareja y sus momentos y sus problemas. Y en realidad no es que sea necesario saber bien en qué punto comienza y termina una cosa, porque precisamente ese juego de que todo puede ser verdad o todo puede ser una ficción (y no importa) es lo que le da su mejor dimensión a la película.

Una película divertida, interesante y que en general se deja mirar bastante bien. Hay algo en Charlyne Yi que me sigue conflictuando un poco y no alcanzo a precisar qué es, pero creo que el resto del desarrollo lo compensa bastante bien.




¿Algún otro documental sobre el amor que les guste? (bueno, sí, la película es más en la línea de ficción disfrazada de documental, pero ese no es el punto)

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